Hoy hablaremos de una creencia que muchos hombres tienen y que les hace
perder demasiado tiempo y energías a la hora del ligue. Un tema que quizá sea
polémico, pero que es demasiado práctico a la hora de aprender experiencias,
ganar confianza y criterio. La creencia es esta:
“Las mujeres desaprueban a
un hombre que sale con varias mujeres al mismo tiempo”.
Creo que he escuchado innumerables veces a
hombres diciendo cosas como estas: En verdad me gusta ésta mujer/Estoy seguro
que ella es la mujer para mí/*No quiero estropearlo todo con ella/Quiero
enfocar toda mi atención en ella/*No hay nadie como ella (si… Marc Anthony… te
hablo a ti).
Créeme, la lista sigue y sigue.
Frecuentemente los hombres encuentran una mujer atractiva y tentadora, y luego
proceden a arruinar todas sus oportunidades por enfocar absolutamente toda su
atención en ella, haciéndola el centro del mundo.
Muy mal. En serio. Muy mal
Pilas que no estoy hablando de ser infiel o
de tener varias mujeres cuando tienes novia o una relación estable. Si ya te
formalizas con alguien, dedícate a ella. Acá estoy hablando del proceso de
salir y seducir sin tener una relación estable y formal.
Antes de que empieces a decir que quizá
estamos locos, que perdimos la razón, o que estamos desvariando, déjame darte
cinco razones por las que tu deberías salir y conocer más mujeres, en especial
cuando conoces a una persona que en verdad te gusta.
1. Actitud y confianza: Cuando
tu enfocas tus esfuerzos en una sola mujer tu no tienes amortiguador que
proteja tu actitud y confianza. Cuando ella te rechaza tu caes en la trampa de
empezar a pensar qué hiciste mal o de pensar qué debes hacer la próxima vez. No
puedes mantener una actitud saludable o balanceada cuando pones todos los
huevos en una sola canasta. Todos tenemos miedo a perder, y ese miedo está
acompañado de la creencia de que “perdemos oportunidades”. Cuando tu empiezas a
entender que tienes muchas más oportunidades tu confianza empieza a despegar.
Tu miedo a perder empieza a disiparse y tu te relajas porque sabes que ESTA
PERSONA, NO ES LA ÚLTIMA.
2. Perspectiva y punto de comparación: Cuando
sales con más de una mujer, tu tienes un esquema de referencia para comparar y
contrastar personalidades, comportamientos, integridad. Es tan fácil empezar a
racionalizar sus comportamientos y banderas rojas cuando tu no tienes nada
contra qué comparar.
3. Valor percibido: Atento
a esto que te voy a decir: LAS MUJERES QUIEREN LO QUE OTRAS MUJERES QUIEREN.
Las mujeres adoran los diamantes no solamente porque son caros y raros, sino
porque otras mujeres los desean también. El tema acá es demanda. Lo que es
común no es valorado, y lo que es fácilmente obtenido es común. No hay un mayor
acelerador de atracción cuando una mujer sabe que detrás de su hombre hay
alguien más (lo cual también es cierto para los hombres, ¿no nos ponemos
salvajes y nos espabilamos cuando sabemos que tenemos competencia?) Un tipo con
demanda es un tipo al cual las mujeres miran y se preguntan: “Y este, ¿qué se
trae?”.
4. La espiral autodestructiva: Mira
esta historia a ver si se te hace conocida. Rafael conoce a Carolina, a Rafael
(Rafa) le encanta Carolina (Caro). El la llama y cuadran una salida para
tomarse un “cafesito/cerveza/cocktail” … lo que sea… Empiezan a salir y se la
van llevando bien. Rafa le deja mensajes a Caro diciéndola que ella es
grandiosa y que ojala pudieran salir a cenar. Ella lo llama y cuadran salida.
Van a cenar a un rico restaurante de sushi (Rafa es un tipo exclusivo… no cabe
duda), Rafa está totalmente enfocado en Caro (Carito), ella se va dando cuenta,
ella instintivamente se pone en guardia. Se da cuenta que Rafa (Rafita) está
como bobo con ella, Carito se va volviendo distante, porque siente presión. La
cita termina, pero ahora las cosas van como raras. Rafita se angustia y la
llama, trata de que las cosas se normalicen y que ella no vaya a perder el
interés, Carito empieza a evitarlo, Rafita empieza a tener dificultad para
respirar… Y la espiral sigue. No es que hayan hecho nada malo, Carito es una
buena niña, pero se empezó a apartar… porque sí… porque así es ella, se empezó
a estresar. Ni ella misma sabe qué le pasó, Rafita era un buen tipo.
Cuando te centras en una sola persona
empiezas a tomar decisiones poco saludables, pierdes perspectiva fácil, te
armas historias paranoicas, te estresas, tu imaginación da vueltas y vueltas.
Cuando sales con una sola mujer, no tienes más opciones. Si sales con varias,
tu escoges.
5. Disparas el mecanismo de la “exclusividad”
demasiado pronto: Ella empieza a creerse única, y ese es un pedestal que no te favorece,
ella sabe de tu escases y lo puede aprovechar para ser demandante o ingrata.
Como es cierto, estás escaso, tu reclamarás atención y eso te hará suplicante.
Las mujeres no quieren hombres necesitados.
Punto. Hay un tipo de hombre, el CITAS EN SERIE, este tipo gasta un montón de
tiempo enfocándose en una sola mujer, y puede tener algún éxito encontrando una
mujer que también es CITAS EN SERIE. Con cada relación hay una agonía, es un padecimiento,
el retrocede, y vuelve a salir con otra mujer, cada experiencia le recuerda el
rechazo, que cuando encuentras a alguien el proceso de concretar algo es muy
largo, que hay muchos jueguitos, que el amor siempre busca lo conveniente, que
la gente se niega a lo que siente. El vuelve y retoma el proceso, una y otra y
otra vez. Es un repitente consumado que pierde el curso por lo mismo. Tú, por
tu parte, mantente saliendo con varias personas, hasta que encuentres a alguien
que merezca tu completa atención.
Escrito A. Bonilla
No hay comentarios:
Publicar un comentario